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Normalmente la crónica del derbi en casa empieza comentando con qué nos ha sorprendido la Demencia. Esta vez no. Maldito COVID. La sorpresa llegó con el quinteto inicial de Movistar Estudiantes: Avramovic, Sola, Vicedo, Djurisic y Arteaga.
Arranque de tú a tú, con mucho ritmo y la sección de baloncesto del Real Madrid Club de Fútbol bien de tiros desde fuera del área (aka “triples”): 9-11 tras los primeros tres minutos, 12-18 mediado el cuarto.
Ante el atasco ofensivo (medio cuarto sin anotar), probaba alternativas Movistar Estudiantes, acabando el cuarto Roberson, Barea, Avramovic, Brown y Delgado. En el marcador, 12-22.
¿Se había acabado el derbi? Ni mucho menos. JJ Barea rompió la sequía colegial, y la conexión latina Puerto Rico – Dominicana con Ángel Delgado volvió a meter en partido a Movistar Estudiantes: 20-25.
Su sumó Avramovic (6 puntos de los 21 con que acabó, en este segundo cuarto), que ponía el 28-31. Mordían los colegiales: se encararon Delgado y Garuba, técnica para ambos. Esto con público hubiera ardido.
Paciencia en defensa, triple de Roberson para empatar: 33-33. Bailaba claqué en la pintura Arteaga para recuperar la ventaja, 35-33. ¡Cómo hubiera rugido el WiZink con esto! El parcial en este segundo cuarto había sido 23-13, para llegar 35 iguales al descanso.
Repetía el quinteto inicial tras el paso por vestuarios, y Djurisic daba otra vez ventaja a Movistar Estudiantes, 37-35. El derbi estaba siendo de tú a tú, con intercambios de ventajas cortas, y muy bien al rebote pese a tener enfrente a la torre de Europa, Walter Tavares: 40-40, 40-43, 44-43, 44-48, 49-48…
Faltaba el sexto hombre detrás, pero los colegiales parecían notar su apoyo desde los televisores: al último cuarto llegábamos con un ajustado 51-54.
Llevaban la iniciativa los de Valdebebas, con Tavares intimidando en defensa: 54-59 tras dos minutos. Una antideportiva pitada a Vicedo podría haber sido un punto de inflexión, pero Avramovic dijo que no robando la cartera a los vecinos de ciudad: 56-60.
Djurisic encontraba a Delgado bajo el aro (58-63), pero un triple de Causeur obligaba a pedir tiempo muerto quedando seis minutos por jugarse: 58-66. No se rendía Movistar Estudiantes pese a que cada jugada positiva tenía respuesta blanca: 2+1 de Avramovic para el 61-69 quedando 4:30.
Pero al transatlántico merengue acabó llevándose el encuentro cual gota malaya, sin mostrar la superioridad que se presupone a un equipo de su nivel en la semana de Copa, pero ganando al fin y al cabo: 65-79.
Movistar Estudiantes, que se queda con 5 victorias y 13 derrotas, juega su particular final la semana próxima: el miércoles viaja a San Sebastián para jugar el partido aplazado contra el Acunsa GBC, que presenta un balance de 4-16.
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Fotos: Juan Pelegrín /Movistar Estudiantes
