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Sin Jankovic, traspasado, ni Suton, lesionado, el primer quinteto de 2019 lo compusieron Cook, Brizuela (que superó sus molestias), Gentile, Caner-Medley y Whittington. La “Mamba Vasca” tomaba protagonismo desde el principio con cinco puntos consecutivos (6-5), y Kevin Tumba hacía lo propio con el conjunto pimentonero: 12-7 mediado el cuarto.
Con Gentile sacando faltas y con buenas jugadas de equipo, Movistar Estudiantes logró las primeras y cortas ventajas: 14-15. Así, en equipo y desde la defensa, Caner-Medley y Clavell abrieron una corta brecha en el último minuto del cuarto (+6, 17-23) que se quedó en nada al final del periodo: 23-23.
Retro pero moderno, como buen “hispter”, Shayne Whittington empezó a asumir el protagonismo que Movistar Estudiantes necesitaba, con siete puntos consecutivos, por fuera y por dentro, para empezar el segundo cuarto: 27-30.
Las ventajas, cortas, eran para el equipo colegial, que lograba apretar en defensa para que cada canasta del UCAM les tocara sudarla. Rotaba Berrocal para mantener físicamente a tope a los suyos, y Víctor Arteaga se sentía cómodo en la que fue su pista hace unas temporadas: 36-42.
Pero, como sucedió en el primer cuarto, Movistar Estudiantes no supo mantener la ventaja para acabar el cuarto: Soko puso el encuentro al descanso en solo un puntito: 43-44.
Sentó bien el paso por vestuarios al conjunto colegial, que tras ver otra “lluvia de peluches” solidaria, decidió que no iba a ser solidario y que iba a protagonizar una lluvia de canastas: Whittington y Gentile firmaron un parcial de 0-13 que ponía el marcador con un buen 45-57.
El partido se embarró, con Gentile teniendo sus más y sus menos con Rojas y la grada caldeándose. Pero no se amilanó Movistar Estudiantes. Arteaga y Cook mantenían la ventaja estudiantil rondando la decena, que se quedó, no sin sudarla, en 61-68 al terminar un buen tercer cuarto.
No iba a ser fácil: UCAM Murcia golpeó primero en el último periodo y tras antideportiva de Gentile se pusieron a uno: 67-68. En esos momentos delicados, Movistar Estudiantes se encomendó a las muñecas de Cook y Clavell para volver a poner algo de tierra de por medio, a la que se sumó otra delicatessen gentileza de Alessandro: 69-78 a 6 minutos para el final.
Los Tercios murcianos no dejaban de intentarlo, pero en el mar de nervios en que se estaba convirtiendo el encuentro, los del Ramiro supieron moverse mejor. Gentile encontraba a Arteaga bajo el aro para volver a poner la máxima a dos minutos y medio para el final: 71-83.
Paciencia, paciencia, la madre de la ciencia. O “tranquilidad y buenos alimentos”, que decía mi abuela. Con esos ingredientes, Movistar Estudiantes sentenció el encuentro y logró abrir el año con una importantísima victoria, la cuarta de la temporada: 73-88.
No tendrá mucho tiempo para celebraciones el conjunto colegial: el domingo 6 a las 19:30h recibe en el WiZink Center en un nuevo derbi madrileño a la sección de baloncesto del Real Madrid Club de Fútbol. Un reto mayúsculo pero que se afronta con otra cara. ¿Y por qué no?
