
La plantilla de Asefa Estudiantes ha tenido una pequeña sorpresa antes de coger el autobús para ir al aeropuerto y ponerse rumbo a Bilbao. Dos decenas de “dementes” habían tomado la entrada del Magariños para despedir a la plantilla.
Banderas, pancartas, cánticos, humo azul y algún que otro petardo han recordado durante unos minutos el ambiente de los años 80 en Serrano 127, ante las sonrisas cómplices de una plantilla que no se lo creía. Un pequeño “chute” más de ilusión para un equipo ya de por sí sobradamente ilusionado. Mañana se reencontrarán en el Bizkaia Arena, y ahí no serán 20. Serán 900. ¡Queremos la Copa!