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HISTORIAS DEL «ESTU» (9): ANTONIO MECHA, EL RAMIRO Y LA CASUALIDAD

29 mayo 2008

Como todas las semanas, aquí tenemos una nueva entrega de las historias que nos enviáis los seguidores de MMT Estudiantes. Esta ocasión, Antonio Mecha recuerda cómo empezó a interesarse por el «Estu» a raíz de matricularse en el Ramiro de Maeztu, y cómo evolucionó el equipo desde los 80 hasta ahora.

HISTORIAS DEL «ESTU» (9): ANTONIO MECHA, EL RAMIRO Y LA CASUALIDAD

Quisiera contaros mi relación con el ESTUDIANTES:
Todo comenzó cuando tenía 14 años (ahora tengo 40, alguna que otra cana, pero la misma ilusión que entonces). Yo sabía muy poco de Baloncesto. Al “Estu” ni siquiera lo conocía. El único recuerdo anterior que tengo del basket eran los torneos de Navidad del Madrid, que como se hacía en esa fecha, siempre te pillaba en casa y le echabas un vistazo.

Con 14 años tuve la SUERTE, y recalco la palabra suerte, de entrar a estudiar al RAMIRO DE MAEZTU. Al hacer la matrícula te daban todos los papeles y al empezar las clases un ABONO para ver al Estu toda la Temporada, con tu foto y todo (todavía tengo alguno de esos carnets). Al primer partido fui por casualidad y porque a un compañero de mi clase no le gustaba y me pasó su abono. Buscando alguna triquiñuela conseguí que mi hermano pequeño me acompañara a algún partido.

El primer recuerdo que tengo del Estu es mucho ruido. El Magariños parecía un día de Navidad en la Gran Vía, lleno de gente y alboroto. Yo no sabía donde ponerme y encontré a una persona conocida (estudiábamos juntos ITALIANO, si habéis leído bien, Italiano en el Ramiro). Al poco tiempo me enteré que era el GAVIOTO, una persona muy conocida e importante en la demencia de aquellos tiempos, y allí que me puse. Fue un subidón, no parábamos de animar, cantar, reírnos y eso me enganchó. No ganábamos muchos partidos pero nos divertíamos mucho, lo pasábamos bien.

Conseguí hacer a mi hermano socio, y más tarde a mi otro hermano también; después a nuestras mujeres y así hasta el día de hoy que tenemos a la familia enganchada. Vi jugadores de fábula, como McKoy (parecía salido de una película del Bronx), Terry Stoots (un jugador blanco que hacía unos mates espectaculares), Chuck Aleksinas (fue el primer jugador que me impresionó por su fuerza) y muchos más, pero esa temporada fue muy difícil y nos tuvimos que jugar el descenso con el Peñas Recreativas de Huesca (el Magia de Huesca), creo que fue a un play-off a tres partidos, pero sólo me acuerdo del último. Afortunadamente nos salvamos en el último partido y la alegría que sentí fue inmensa, creía que irrepetible.

Pasaron los años, muchos jugadores, algunos inolvidables como David Russell (para mi el jugador más elegante que hemos tenido), el “oso” Pinone (vaya debut en el pabellón del Madrid, y allí que estábamos nosotros), Rickie Winslow, Pedro Rodríguez, Vicente Gil, y un larguísimo etcétera de jugadores grandiosos. Nos acostumbramos a ganar, y cada vez más y más, y esto enganchó a mucha gente. Logramos grandes éxitos (Final Four de Estambul, Copa del Rey en Granada, Final de la Liga ACB ante el Barca), pero de repente vinieron las épocas de vacas flacas, y la gente seguía respondiendo. El Estu es maravilloso.

Este año se parece a mis primeros grandes recuerdos del Estu. El Madrid Arena lleno (en lugar del Magata), la gente no cesa de animar (mucha más gente que entonces), la situación límite (jugándonos el descenso), y estoy seguro que vamos a tener la misma resolución: nos quedamos en la ACB.

En resumen, el Estu se lleva en el corazón, y mi corazón me dice que esto es un mal sueño que va a tener un final feliz. Cada partido este año ha sido intenso, casi de sufrimiento continuo, a veces, casi de desolación (como el domingo frente al Fuenla), pero estamos con vosotros, estamos muy vivos a pesar de lo que pueda parecer, y lo único que os pedimos es que en los tres partidos que quedan, y en especial en el de Granada, tengáis la calma suficiente para jugar como sabéis, con la mayor tranquilidad posible y pensando que sólo hay que ganar, sin diferencia alguna. Os acompañaremos en el viaje y nosotros nos encargaremos de llevaros en volandas hasta nuestro objetivo: seguir un año más y para siempre en la ACB. Mucha suerte chavales y mucha calma, esto será suficiente para lograr nuestro objetivo.

GRACIAS a todos los que hacen posible que un club como el ESTU siga vivo, y recordad: nos vemos el año que viene en la A.C.B.

ANTONIO MECHA CUBERO (socio del club)

PD: Historia enviada el 24 de abril de 2008, la semana antes del CB Granada-MMT Estudiantes

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