
Cada tarde y cada fin de semana, las viejas canastas de los patios del Ramiro de Maeztu y las más nuevas del polideportivo Antonio Magariños bajan de los 3,05 metros a los 2,60, para que decenas de niños y niñas de 6 a 12 años vestidos de azul se desviven para intentar anotar en ellas. Muchos no tienen muy claro cómo tienen que hacerlo, otros no saben ni botar el balón… pero para eso están ahí: para aprender y disfrutar.
Es el minibasket, o más coloquialmente, “el mini”. Una categoría de baloncesto que en el Asefa Estudiantes es toda una tradición con más de 40 años. Hay quienes afirman que, de hecho, se inventó en los patios del Ramiro de Maeztu Aunque el presidente del Club y Fundación Estudiantes, Miguel Ángel Bufalá, que vivió los inicios del minibasket en el Ramiro, afirma que esto pertenece al ámbito de la leyenda. “El minibasket lo instauró en España Anselmo López, que fue presidente de la FEB y miembro del COE, y una persona muy importante para Estudiantes”, explica el mandatario colegial. “LA FIESTA DEL MINI SE HACE DESDE 1976”
“Lo que sí es cierto es que cuando se hizo habitual en toda España, en Estudiantes llevábamos varios años practicándolo”, recuerda Bufalá. La Fiesta del mini se oficializó como día grande de esta categoría en el seno del club Estudiantes en la temporada 1976-77, cuando “se podían juntar casi cuarenta equipos, y venían a ver a los niños la familia entera, incluyendo tíos, abuelos, primos… era impresionante”, explica el presidente del club, que se alegró de la tremenda respuesta que sigue teniendo el minibasket entre la cantera estudiantil. Queda patente que el minibasket es una auténtica tradición en Asefa Estudiantes, y que una temporada no es temporada sin la “fiesta del mini”. En este día, todos los componentes de todos los equipos de minibasket de la cantera de Asefa Estudiantes, desde los de la Escuela de Baloncesto a los equipos federados llenan, aun más que cualquier día de entrenamientos si cabe, las canchas del Magariños y las exteriores del Ramiro de alegría por el baloncesto. De jugar por jugar. “EN ASEFA ESTU EL BALONCESTO NO SE PARA EN VERANO” “Esto es volver a la esencia del deporte, que se agradece después de lo vivido este año. Demuestra que aquí el baloncesto es mucho más que el primer equipo”. Palabra de capitán. Carlos Jiménez fue una de las estrellas invitadas en la fiesta del mini, y compartió equipo con muchos de los pequeños. “Es una auténtica fiesta, pero es que ni en verano se acaba el baloncesto en Asefa Estudiantes. Están también los Campus, a los que he ido en multitud de ocasiones, que tienen un grandísimo nivel en unas instalaciones de primera. Me servía a mi para prepararme para las selecciones, figúrate lo que aprenden los niños… cuando mis hijos tengan edad para ir seguramente acudan porque les vendrá muy bien y disfrutarán”, explica el ya ex alero internacional.
“EL MINI ES JUGAR POR DIVERTIRSE, LA ESENCIA” Lo ve igual el joven Edu Martínez, que vivió su primera temporada en Liga Endesa y para quien “es muy gratificante participar en esta fiesta y recuperar la esencia. Jugar por jugar, porque te diviertes, porque aprendes… recuerdo cuando jugué mini en mis inicios y es una categoría muy divertida”.
AHORRAMÁS, PRESENTE Los dos aleros del equipo de Liga Endesa y la ala-pívot internacional del de Liga Femenina 2, Sarah Rodríguez, fueron los encargados de entregar las bolsas cortesía de Ahorramás, patrocinador de la cantera de Asefa Estudiantes, a los centenares de participantes en la fiesta del mini, que además participaron en el sorteo de camisetas firmadas por los tres jugadores. Entre los participantes en la fiesta del mini encontramos al equipo Alevín Zurro, que este sábado participa en otra fiesta del mini, la de la FBM, en la que jugará por el tercer puesto de Madrid; y a los equipos benjamines que viajarán este fin de semana para el I Torneo MiniGodella contra equipos como los anfitriones o el Unicaja.