Mariano Arasa (Teruel, 18-3-1976) comienza su segunda temporada al frente del filial de Asefa Estudiantes, club al que llegó la campaña pasada procedente del FEVE Oviedo de la desaparecida LEB Bronce. El Asefa Estu es el segundo club profesional en el que ha sido primer entrenador, tras ser entrenador ayudante en el Fuenlabrada en LEB y ACB junto a Luis Casimiro.
Empieza tu segunda temporada al frente del EBA de Asefa Estudiantes, pero antes valora cómo fue tu primer año. Mi primer año en Asefa Estudiantes fue muy positivo. Empezamos dubitativos, algo normal en equipos tan jóvenes y costó arrancar, pero a partir de enero hubo una clara mejoría. Ganamos 10 de los últimos 13 partidos, y no jugamos playoffs sólo por el average. Acabé muy contento con los resultados y con la calidad humana del grupo. Es para estar muy satisfechos, ya que aunque nuestro equipo fuera tan joven la EBA no deja de ser una liga senior y que además estos años ha aumentado la calidad con la reducción de grupos. El año pasado el Asefa Estu salía con una plantilla muy joven, de las de menor edad de la categoría, pero mediada la temporada se fichó a un veterano como Carlos Martínez. ¿Este año se va a volver a hacer un bloque de jóvenes apoyados en algún veterano? El planteamiento inicial era el de plantilla muy joven, y la inclusión de Carlos Martínez fue para cubrir la baja de Eldar Fernández. Estaba sin equipo y nos había pedido el favor de entrenarse con nosotros, así que estaba claro. Este año el equipo se vuelve a plantear como muy joven, más todavía que el año pasado, hemos pasado de una media de edad de 20 años a una de poco más de 18. Permanecen cuatro jugadores (Ubaldo Hidalgo, Iván Cruz, Jaime Fernández y Eduardo Martínez); y ascienden cinco jugadores del junior. Además, los dos fichajes, Tomás Fernández y Francisco Guerra, son también jugadores de 18 años. ¿Cuál es el objetivo de un equipo tan joven? El objetivo del equipo debe ser, primero, la permanencia. Va a ser una liga muy dura con varios equipos que se han reforzado muy bien. Pero luego la competición es lo que te pone en tu sitio. Lo que sí observamos es que es una plantilla muy alta pese a ser aun muchos de categoría junior… Sí, sí, realmente tenemos mucha altura. Tenemos dos jugadores que superan los 2,10 metros; un 2.05; aleros de más de dos metros… ¿Cómo jugará el Asefa Estudiantes de Liga EBA este año? El juego que queremos hacer se basa en la presión por toda la pista, en correr y defender duro… Es lo que toca en un equipo de formación como este. Claro que para hacer esa presión y correr hay que adaptarse al físico de nuestros jugadores. Al ser tan altos quizá no sean tan rápidos, pero sí se podrá rebotear más lo que nos permitirá correr más… todo se irá viendo con los partidos. Tres jugadores (el pívot Iván Cruz, el alero Eduardo Martínez y el base Jaime Fernández) están entrenando esta pretemporada con el primer equipo ¿cómo afecta eso a tu trabajo? Es un orgullo como entrenador que jugadores de tu plantilla den el salto al primer equipo, aunque sea en pretemporada. Estamos de acuerdo con Luis Casimiro para que Eduardo, Iván y Jaime solo doblen entrenamientos dos días a la semana; y para que jueguen los partidos amistosos con nosotros, ya que a priori con el ACB no tendrían minutos. En resumen: esta pretemporada entrenan con el primer equipo pero juegan con el EBA. Tienen roles distintos en cada equipo, y están sabiendo adaptarse a ellos. En el ACB, claro, están expectantes y su papel fundamental es ayudar a entrenar; mientras que en el EBA tienen un rol importante dentro del equipo. Es una dualidad que les viene muy bien y es un gran aprendizaje. Fuiste ayudante de Luis Casimiro en el Fuenlabrada durante tres temporadas y por tanto le conoces bien. ¿Cómo has visto desde fuera de su equipo de trabajo su labor en Asefa Estudiantes? La primera temporada de Luis fue inestable, era un año de transición. Pero después quedar séptimos y volver a Europa es un éxito rotundo y por el que creo que nadie apostaba al principio del año. Es un entrenador muy equilibrado, que aporta tranquilidad a las plantillas y al club, y además al que se ve una directriz muy clara, algo que es muy importante.