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PALIZA A ANGOLA (50-98) PENSANDO EN CROACIA

18 agosto 2008

La Selección Española ha triturado a Angola, ganando por 50-98 tras 30 minutos demoledores. Pau Gasol mandó con 31 puntos, pero Navarro, Garbajosa y Raül recuperaron sensaciones.

PALIZA A ANGOLA (50-98) PENSANDO EN CROACIA

España despidió a Angola de la mejor forma posible, con una exhibición de superioridad y con confianza renovada, por un escandaloso 50-98 final. Pero costó, porque los nuestros estuvieron a punto de cometer los mismos errores que en el partido contra China y en el arranque contra Alemania. Un exceso de relajación, cierta tensión en los tiros y una falta de intensidad en defensa dio alas a los angoleños, que soñaron con una sorpresa estéril durante los primeros diez minutos (25-15 para los africanos al principio del segundo cuarto).

Pero los nuestros sacaron oficio y ganas de gustar y de la mano de los pilares de la Selección en esta competición (véase un extraordinario y muy superior Pau Gasol, Rudy, Ricky…) rompieron el partido con un segundo cuarto inapelable. La ausencia de Marc Gasol, por precaución ya que arrastraba molestias, no se notó, mientras que Carlos Jiménez regresó de su lesión sin dificultades aparentes.

La Selección Española salió dormida, pero se despertó rápidamente consiguiendo el objetivo principal del partido (aparte de ganarlo, lógicamente): gustarse y renovar la confianza perdida tras el partido contra Estados Unidos. Y funcionó: Pau Gasol estuvo mejor que nunca (31 puntos con 13/14 en tiros de dos, y 8 rebotes), Ricky (5 asistencias) y Rudy mostraron talento de nuevo y Raül López volvió a sentirse cómodo en la pista (7 puntos).

En definitiva, el mejor calentamiento posible antes de los cuartos de final: lección de intensidad al principio, advertencia angoleña, eficacia de la fórmula habitual (Pau más la dobre «R»), recuperación de la confianza y marcador rotundo (casi 50 puntos de ventaja). No se puede pedir más en un partido sin trascendencia en la clasificación y ante una Angola que no ha podido estar a la altura de esta competición.

Relajación española y Angola se escapa
Cambian los nombres, pero no el inicio. Con Ricky, Navarro y Garbajosa de titulares, el inicio fue el de siempre: salto inicial y canasta fácil sin oposición. Pero España, consciente de que no se juega nada en el partido, no supo salir con la intensidad habitual y dejó que los angoleños tomaran el control del partido. Para los nuestros el partido parecía no tener importancia, mientras que para los africanos, éste era tan trascendente como los cuatro anteriores.

Lo demostraron Mingas, Costa y Jerónimo, que desde el triple y con acciones individuales consiguieron las primeras ventajas (23-15 al final del primer cuarto) ante una defensa española apática. Los de Aíto García Reneses consiguieron siete robos en el primer periodo, pero fruto de una buena colocación táctica, más que de la agresividad habitual; pocas segundas ayudas y menos contundencia a la hora de puntear los tiros, dieron vida a los angoleños.

Los chispazos de Ricky Rubio (al joven talento le da igual contra quien juegue y sigue asombrando con pases y robos imposibles) no escondieron la imprecisión en el lanzamiento de Navarro y Garbajosa, principalmente.

Llega el hambre y España recupera el partido
Empieza el segundo cuarto, con rotaciones de Aíto… pero sin que nada cambie. Errores en el tiro español (0/11 en triples llegaron a estar) y Angola que no se va, porque no sabe jugar mejor. Se nota que España juega sin convicción, con tiros cortos y brazos agarrotados, sorprendidos por no haber encontrado el partido fácil que esperaban.

Entonces, el reactivo resultó ser Pau Gasol, que vuelve a la cancha consciente de que hay que vencer y convencer y que, junto a los siempre hambrientos Rudy y Ricky, subió un punto la intensidad defensiva y aportó nuevas ideas en ataque: principalmente, aprovecharse de los 2×1 que los de Alberto «Ginguba» Carvalho tienen preparado para el mayor de los Gasol.

Todos se subieron al carro y la lógica se acabó imponiendo; una selección española más intensa y concentrada recuperó el timón del partido (25-28 con un poderoso mate de Pau). En este contexto, el equipo se crece, la presión a toda la pista funciona y Ricky luce más que nunca. Parece que, de repente, la química funciona, el equipo se divierte y España es, de nuevo, la España de Japón y no la de tiempos pasados.

El inicio dubitativo se queda en anécdota y un parcial demoledor de 25-2 devuelve las cosas a su sitio. El cuarto acaba con un trabajado triple de Mingas que sitúa en 10 la ventaja al descanso (30-40).

A recuperar la confianza
Raül se estrena anotando, triple limpio de Garbajosa, Navarro recupera el tacto en los tiros… 18 puntos entre los tres en el tercer periodo. La segunda mitad empieza con una España más tranquila, con velocidad de crucero y con ganas de gustarse. El partido está roto y los nuestros se escapan por más de 20 puntos (39-61 a falta de cuatro minutos para finalizar el tercer cuarto); el objetivo está claro, sentirse cómodos y llegar mentalizados a los cuartos. Angola desaparece y al final del tercer cuarto, la diferencia llega a los 30 puntos (41-71). Ni Mingas ni Jerónimo ni Costa parecen estar ya en la cancha; su seguridad y descaro se desvanecieron a golpe de robo de balón y alleyoop.

Final sin historia
Con una Angola entregada, el segundo escuadrón español también apareció siendo Mumbrú (dos triples) y Felipe Reyes (incansable bajo los aros) los referentes. Juego al ralentí, pero el marcador siguió reflejando la superioridad ibérica… hasta que vuelve Pau a cancha y destapa el tarro de las esencias. Sus compañeros se empapan de la inspiración del de Sant Boi y hacen disfrutar a la grada con pases por la espalda, triangulaciones y más alleyoops. Al final, partido muy cómodo para los subcampeones europeos que ahora esperan a Croacia.

ACB.com