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Un derbi siempre es un derbi, y Estudiantes salió a por todas en Leganés en el XXX Torneo de la Comunidad de Madrid.
Con un quinteto titular que pinta a habitual durante la liga (Colom, Kuric, Rabaseda, Ivanov y Nogueira), los colegiales tomaron pronto el mando del partido corriendo como una exhalación y con un tremendo acierto desde el 6,75, especialmente por parte del alero catalán, que venía ya enchufado del 3×3 de la presentación de la liga Endesa: 19-28 en un primer cuarto de auténtico run&shoot.
Pese a que Nogueira se cargó pronto de faltas, Ivanov, Fran Guerra y un Marko Banic que poco a poco va entrando en rotación y mostrando su tremenda calidad, mantenían al Estu también por dentro en el segundo cuarto, mientras que Andrés Miso y Quino Colom también se unían a la demencia anotadora colegial: hasta 13 puntos de ventaja llegaron a tener los del Ramiro, cómodos en el intercambio de canastas.
Poco tardaría, sin embargo, Rudy Fernández en asumir el liderato que se supone a un jugador de su categoría, y dejó las cosas para el descanso con una exigua -tratándose del Real Madrid- ventaja de siete puntos: 39-46.
Hasta ese momento, Sergio Rodríguez -que, al igual que Rabaseda, también había tenido una mañana muy cargada de eventos promocionales con motivo de la presentación de la liga Endesa- no había pisado la pista. Sin embargo, quedó claro una vez más que no hay peor cuña que la de la propia madera, el ex jugador estudiantil cambió totalmente el rumbo del XXX Torneo de la Comunidad.
Dio otra cara y otro ritmo al vecino rico, mientras que el Estudiantes se mostró incapaz de reaccionar ante un vendaval al que se sumó Boroussis: 7-0 para empatar, amago de reacción colegial pero no. El parcial de 7-27 de este periodo dejó bien claro que las cosas volvían a donde la lógica presupuestaria indica: 66-53 para iniciar el último cuarto.
Ahí Estudiantes lo intentó. El ritmo anotador se frenó, pero no la tensión, que se cortaba con un cuchillo, entre constantes protestas a los árbitros por parte de ambos banquillos.
Dos buenos ataques seguidos, con triple de un Kuric menos acertado que otros dias de pretemporada pero siempre asumiendo responsaiblidad pusieron al Estu a 9 a falta de cinco minutos (68-59), pero de nuevo el barbudo base tinerfeño del Real Madrid decidió.
Al final, y un pequeño acto de justicia poética el partido se cerró con siete canteranos del Estu en pista: cinco por los colegiales (Fernández, Miso, Vicedo, Hernangómez y Guerra) y dos por los merengues (Díez y el propio Sergio Rodríguez).
REAL MADRID CF 86 (19+20+27+20): Rudy Fernández 24, Dani Díez 0, Nikola Mirotic 15, Sergio Llull 4, Ioannis Bourousis 9 -cinco inicial- Dontaye Draper 0, Felipe Reyes 4, Sergio Rodríguez 11, Jaycee Carroll 9, Tremmell Darden 0, Marcus Slaughter 2 y Salah Mejri 8.
Estudiantes 69 (28+18+7+16): Quino Colom 11, Kyle Kuric 10, Xavi Rabaseda 12, Lucas Riva Nogueira 0, Dejan Ivanov 15-cinco inicial- Fran Guerra 6, Jaime Fernández 2, Edgar Vicedo 0, Marko Banic 0, Juan A. Hernangómez 2, Darío Brizuela (no jugó) y Andrés Miso 11.
