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No ha sido una temporada fácil en Bilbao. Con problemas en lo deportivo por algún fichaje que no ha terminado de salir bien, los rumores sobre la posible venta del club y los aires de crisis, terminaron por desestabilizar a una plantilla que pese a todo seguía sacando victorias y avanzando en Eurocup, aunque no pudo conseguir uno de los objetivos del año: clasificarse para la Copa del Rey.
Tras la tempestad llega la calma, y pasados los peores momentos, los de Rafa Pueyo viven actualmente centrados en un solo objetivo, clasificarse para los Playoffs. Tras la eliminación de la Eurocup, en cierto modo balsámica con una plantilla algo limitada, Alex Mumbrú capitanea a un equipo que empieza a carburar en la competición nacional, y ya roza el octavo puesto.
Para seguir con la progresión buscan la victoria ante un equipo al que en los últimos años tienen tomada la medida, Tuenti Móvil Estudiantes. Los vascos son el único conjunto contra el que los colegiales no han conseguido ni un triunfo en las últimas 3 temporadas (dato ofrecido por Javier Atance), y en el partido de la primera vuelta, ya demostraron que sea cual sea su momento, son competitivos.
Con la baja por lesión de Raül López lo tendrán más complicado, pero si los de Pueyo se han caracterizado por algo esta temporada, es por aprender a luchar contra las adversidades. Repasamos su plantilla.
PROBLEMA EN LA DIRECCIÓN DE JUEGO
Uno de los jugadores más importantes esta temporada para los vascos ha sido Raül López. El de Vic es en todo momento el termómetro del Bilbao. Si funciona, los de Pueyo funcionan, y cuando se queda parado el equipo no gana. Su lesión es, por tanto, un problema importante para el técnico, que tendrá inventar algo para repartir sus minutos.
El que tomará, seguro, más protagonismo será Roger Grimau, que esta temporada ya viene haciendo de director de juego, y que es uno de los muchos veteranos de los que dispone Bilbao Basket.
ALEX MUMBRÚ, MÁS QUE UN CAPITÁN
Junto con Raül, el otro hombre encargado de capitanear al equipo dentro y fuera de la pista ha sido Alex Mumbrú, cuya temporada está siendo de matrícula de honor. El veterano es el máximo anotador del equipo, y cuando no tiene el día en el tiro, su aportación va mucho más allá de los puntos. Rebotes, asistencias, defensa… lo que hace que en muchos partidos haya rozado números de triple-doble.
Junto con él, deberán dar un paso adelante en el juego exterior dos hombres bastante irregulares: Fran Pilepic, que ha tenido buenos momentos, pero que no termina de temer el protagonismo esperado, y Dairis Bertans, el cohete letón que suele encenderse rápidamente en los partidos, y tiene rachas espectaculares. Completa el juego exterior Sergio Sánchez, con papel testimonial, y el croata Zoran Vrkic, recambio habitual de Mumbrú con menor protagonismo.
EL REGRESO DE GERMÁN
El juego interior de los vascos también está capitaneado por veteranos de la competición. Destaca un nombre propio, Germán Gabriel, que regresa al Palacio de los Deportes para enfrentarse a Tuenti Móvil Estudiantes como visitante. En el partido en Miribilla no tuvo su mejor día (es más: tuvo el peor de su carrera, valorando -6), y querrá resarcirse ante sus ex compañeros.
Junto con él, otro luchador que todo entrenador quiere en su equipo y poca afición en el rival, Axel Hervelle, importante en el trabajo sucio de los de Rafa Pueyo, al igual que Antanas Kavaliauskas, uno de los fichajes de este verano que está cumpliendo bien peleándose en la pintura.
Completan el plantel otro viejo conocido de la competición, Damir Markota, que llegó para suplir a Carmichael, la apuesta del verano para los vascos que no funcionó, y el joven Samb.
