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Uno de los grandes hándicaps del Blancos de Rueda Valladolid a la hora de confeccionar su plantilla esta temporada ha sido que, como Asefa Estudiantes, no ha conocido la competición en la que iba a jugar hasta bien entrado el verano.
El equipo pucelano tuvo que reconstruir la plantilla sin apenas tiempo de reacción, ajustándose a uno de los presupuestos más austeros de la competición, y la mayoría de los fichajes llegaron prácticamente en septiembre sin mucho tiempo para completar su adaptación.
Esta combinación se tradujo en una nefasta pretemporada que hizo saltar las alarmas entre la afición pucelana. Derrotas ante equipos de categorías inferiores y partidos en los que no se compite ante los Liga Endesa, que evidenciaron que el equipo todavía estaba por hacer.
El nivel fue subiendo a medida que el tiempo avanzaba, y la sorpresa saltó cuando el equipo que dirige Roberto González sacó el orgullo y la casta para asaltar el Palau Blaugrana en la jornada 1, en una victoria histórica que terminó por dar moral y acelerar el proceso de construcción.
El balance actual en Liga Endesa es de 2 victorias y 3 derrotas, y el equipo todavía tiene trabajo por delante para estar al máximo, pero los americanos parecen ir cuajando poco a poco, y el bloque motivado para evitar los errores del año pasado. Repasamos su plantilla.
SOLO SIGUE UNO
El único jugador que continúa con respecto a la mala temporada pasada es Nacho Martin. Capitán del equipo, fue de lo poco salvable el año pasado con más de 8 puntos y 5 rebotes, y una actitud de lucha constante.
PRODUCTO NACIONAL
Los dos referentes exteriores del equipo que han llegado este verano al conjunto pucelano son producto nacional: David Navarro y Jordi Grimau.
El primero vive su segunda etapa en Liga Endesa tras su paso por Valencia Basket, en la que dejó varios destellos, y tras conseguir el ascenso en la pista con Menorca prueba fortuna en Valladolid, aunque de momento está discreto.
Tampoco está teniendo todo el protagonismo que esperaba el «hermanísimo» Jordi Grimau, ya veterano escolta de la Liga Endesa, que apenas está anotando 2,6 puntos en sus 21 minutos de juego.
También nacional es otro de los refuerzos en el juego interior, Edu Ruiz, formado en la cantera colegial, que tras pasar ya hace dos años por Valladolid, regresa al equipo pucelano después de su experiencia en Granada. Completa el plantel de jugadores españoles el más joven del equipo, Antonio Izquierdo, procedente del EBA de Cajasol, en el que ha estado los últimos años, pero con vena pucelana, ya que nació en Valladolid, y empezó como jugador de baloncesto en el cadete del Pisuerga.
SANGRE DEL ESTE
Pero hasta el momento, los dos mejores jugadores en lo que llevamos de temporada tienen sangre del Este de Europa. No ha terminado de cuajar en ninguno de los equipos por los que ha pasado, pero el fichaje de Uros Tripkovic es todo un lujo para el Blancos de Rueda Valladolid, y el anotador ya ha demostrado con partidos como ante Bilbao, que será la referencia en el perímetro.
También ha sorprendido por su rendimiento Sinanovic. El gigante estaba sin equipo poco antes de comenzar la competición, hasta que el Valladolid le rescató, y el jugador agradeció la confianza con un partidazo brutal en el Palau. Regalo llegado del cielo para los de Roberto González.
Completando el plantel de jugadores de Europa oriental el prometedor Cizauskas, internacional en todas las categorías inferiores de la selección lituana, que llega a Valladolid para crecer con oportunidades.
TALENTO AMERICANO
Aunque sin duda, el talento, y las diferencias las deben marcar en el equipo los americanos, que deben suponer el paso adelante para que el equipo pueda competir de tú a tú ante cualquier equipo de la Liga Endesa.
Uno de los mejores en el inicio está siendo Ian O´Leary, que ya tiene experiencia en categorías FEB en España, ya que llega procedente del Palencia, con 10 puntos y 11,6 de valoración. También está destacando el base Alex Renfroe, formado en Belmont, y procedente del Brindisi, de LegaDue con 8 puntos por partido.
Sin embargo, todavía están por debajo del nivel esperado Alhaji Mohammed, que vivirá un duelo especial con Kyle Kuric, ya que ambos se formaron en la universidad de Louisville. El ghanés se dio a conocer al gran público por su participación en el concurso de mates, pero sobre la pista no está dando todavía todo lo que se esperaba de él, después de una pretemporada bastante notable.
Tampoco está brillando el pívot Otello Hunter, subcampeón de la NCAA con los Buckeyes de Ohio State, con experiencia NBA, ya que jugó –testimonialmente- en los Hawks, que promedia 7 puntos por partido. Solo lleva 3 encuentros con el equipo y el nivel del Blancos de Rueda Valladolid depende, en buena parte, de que vaya a más.
En definitiva, un conjunto totalmente nuevo, que está por hacer, y que tiene que adaptarse a sistemas y jugadores en las primeras jornadas.
