Iberostar Tenerife fue un martillo pilón y demostró en su visita a Movistar Estudiantes por qué se van a jugar el liderato de la Liga Endesa el próximo fin de semana con el Real Madrid.
El último quinteto inicial del (maldito) 2020 lo componían Roberson, Giedraitis, Gentile, Brown y Delgado. Y aunque abrió el marcador el Iberostar Tenerife por fuera, Movistar Estudiantes iba bien al rebote para tomar una corta ventaja: 6-3.
Poco tardarían los canarios, muy físicos, en volver al partido, con un parcial de 2-9 para el 8-14. Respondía Gentile, y rotaba Zamora para mantener esa intensidad (al final del cuarto, habían pisado ya la pista 11 jugadores, incluidos Sola y Arroyo en su primera convocatoria de la temporada): 11-14.
Pero los de Vidorreta seguían con su buena racha para empezar, ahogando en defensa al Movistar Estu, y el periodo terminó con 11-22.
Brown, de tres, rompía el parcial al inicio del segundo cuarto (14-22). Avramovic sacaba la magia de la chistera, anotando y repartiendo: 21-26. El partido era toda una batalla, muy físico, cada punto costaba un mundo. ¡Otro triple de Brown para el 24-29!
Seguían mandando las defensas, nadie anotaba fácil. Trabajado gancho lejano de Arteaga para el 28-33. Pero Iberostar Tenerife estaba más cómodo y lograba marcar la decena al descanso: 29-39.
Cvetkovic, Avramovic, Gentile, Brown y Delgado empezaban la segunda mitad en Movistar Estudiantes. 2+1 del dominicano para empezar bien (32-39). Recortaban distancias los interiores colegiales (36-42), pero Iberostar Tenerife recuperó el mando: 36-46.
Llevaban el ritmo del partido, aunque sin lograr romper del todo el partido ante un Movistar Estu peleón pero que no estaba acertado: 41-53. Y así las cosas, el tercer cuarto terminó con 46-58.
No empezó bien el último periodo (46-62), así que tocó pedir tiempo muerto, pero aunque Gentile abrió la lata, el Canarias seguía a lo suyo (48-65).
Ante el poco acierto exterior (6/27 en triples, 22%), se probaban balones a dentro: Avramovic para el mate de Delgado (52-67). Pero los tinerfeños encontraban respuesta a cualquier argumento colegial: canastas rápidas de Roberson o Cvetkovic… triples de Salin o Huertas: 56-75 mediado el cuarto.
Intentaba todo Movistar Estudiantes, pero no hubo manera ante un Iberostar que no aflojó. Al final, claro 64-90.
El año termina con balance de 5-11; y en apenas unos días un nuevo reto: visita al Monbus Obradoiro el domingo 3 de enero.
Fotos: Juan Pelegrín / Movistar Estudiantes