A Landesberg rogando y con el mazo dando. ¡ASALTO AL PALAU! (95-100)

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Salió Movistar Estudiantes a la pista del Palau Blaugrana con Cook, Brizuela, Landesberg, Suton, Brown… y ganas de hacer la Pascua al FC Barcelona Lassa. ¡0-10 de salida! Aunque el Barça no tardaría en entrar al partido, la ventaja seguía siendo azul cielo mediado el primer periodo, con Brizuela y Landesberg liderando: 8-15.

Para mantener este ritmo frenético, tan poco procesional, había que rotar los costaleros: Arteaga, Caner-Medley, Cvetkovic, Hakanson y Vicedo entraban al partido, y los triples, habitualmente la cruz colegial, hoy sí alcanzaban su objetivo (5/11) para alcanzar 28 puntos al final del cuarto (18-28). Landesberg seguía con el “Modo Mesías ON”, sin parar en este cuarto: 10 puntos.

Un viejo conocido como Edwin Jackson dijo “aquí estoy yo” para empezar el segundo periodo, pero dominando el rebote ofensivo el Movistar Estu seguía mandando (21-32). Si en el primer cuarto el ritmo del partido había sido digno de Rayo McQueen , en este segundo, con las repetitivas saetas de los Dracs de banda sonora, se jugaba más a ritmo procesión, apurando las posesiones (32-42 mediado el cuarto, con Alec Brown asumiendo galones).

Heurtel era el costalero mayor de la cofradía de Les Corts, conduciendo su paso para recortar diferencias, pero Omar Cook hacía lo propio surtiendo de balones a Víctor Arteaga en la pintura para que las ventajas siguieran siendo visitantes: 38-47. Parecía indultar el Barça Lassa al Movistar Estu con fallos inexplicables bajo el aro, pero Koponen desde fuera mostró que de eso, nada: 41-47. Llegaron a ponerse a cuatro, pero al descanso, el mando seguía siendo celeste tras un rebote y canasta de Vicedo sobre la bocina: 43-49.

Cook abría la segunda mitad con un triple, pero respondía el Barça Lassa volviendo a ponerse a cuatro por medio de Tomic y Hanga (48-52). Movistar Estudiantes sabía que un equipo tan todopoderoso como el Fútbol Club Barcelona podía resucitar en cualquier momento… y así sucedió. Heurtel empató a 55; y desde el tiro libre el francés dio la primera ventaja a los culés: 57-55.

Landesberg asumía galones en estos momentos donde quemaba la bola: 59-60, 59-64, 61-68, 64-73… el de Queens estaba en trance, caliente, anotador, tocado por Dios, como reza su tatuaje en el brazo. 18 puntos para el alero judío en este tercer cuarto. Nik Caner-Medley se apuntaba al papel de escudero del héroe, y Vicedo al papel sucio de defensor del antiguo héroe y hoy villano, Edwin Jackson. Pese a los esfuerzos de Ribas y Heurtel, Movistar Estudiantes seguía mandando al inicio del último cuarto: 68-75.

Nunca hay que dar al Barça por muerto, que al tercer día te resucita sin problema. 7-0 de salida, con rabia nada contenida, nada más empezar el último cuarto (75-75, empató Edwin Jackson). Paró el partido Maldonado antes de que “la magia del Palau” envolviera a Movistar Estudiantes, quizá recordando otra visita colegial a esta cancha en 1999 en Semana Santa…

Pero Oriola volvía a poner por delante al Barça Lassa, y Movistar Estudiantes no se encontraba, perdiendo balones en su empeño de encontrar a Landesberg en ataque. La quinta de Brown lo complicaba más aún. Parcial 14-0, 82-75, tras cuatro minutos. Parecía que el milagro del domingo de Pascua había llegado hasta aquí.

Fue precisamente Landesberg el que paró el “vía crucis” colegial. Con paciencia, Sitapha Savané volvió a poner a Movistar Estudiantes a uno: 84-83 a falta de 4 minutos. 4 minutazos. Empataba, quién si no, Landesberg, con un tiro libre a falta de 3:30. ¡Cómo quemaba el balón! Erró cuatro tiros libres seguidos el Barça, y Landesberg, de nuevo calentito, devolvía la ventaja a Movistar Estudiantes: 84-87 a falta de 3 minutos. Respondía Heurtel, pero una bandeja de Brizuela ponía el 86-89. Y otra vez Landesberg, ahora desde el tiro libre, 88-91 quedando dos minutos.

Otra vez Heurtel ponía al Barça a uno… Y se acabó. No habíamos remado tanto para morir en la orilla: Omar Cook y Nik Caner-Medley acompañaron a Sylven Landesberg para sentenciar. Puso el líder del Landismo el 90-96 a falta de 37 segundos y pese al triple rápido de Koponen, el partido estaba visto para sentencia.

Movistar Estudiantes asaltaba el Palau Blaugrana en semana santa, 19 años después de aquella dolorosa derrota en la Final de Korac. Pero ojo, que desde 1999 tampoco es que ir al Palau fuera ir a victorias fáciles: en los últimos 19 años, el Estu sólo había ganado en cuatro ocasiones, y solo una vez por más de 1 punto…

Pero lo importante es el presente: el Estu logra con esta la 11ª victoria de la temporada, segunda consecutiva tras una mala racha, y ahora afronta dos encuentros consecutivos en el WiZink Center: el domingo 8 contra Retabet Bilbao y el miércoles 11 ante Tecnyconta Zaragoza.