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No le salió nada en el parqué a Tuenti Móvil Estudiantes, que tras encontrar el camino en Santiago de Compostela volvió a mostrar ante su sufrida afición su peor cara: la de un equipo que quiere, que sabe jugar mucho mejor al baloncesto, pero que se ve incapaz de demostrarlo en demasiadas ocasiones, como muestran las 12 derrotas en 15 jornadas en su casillero.
CAI Zaragoza, que si perdía decía adiós a su participación en Copa del Rey, salió mucho más metido en el partido y empezó a mandar con un parcial de 0-12 de inicio, con Slokar y Rubio de inicio para intentar parar, sin éxito, a las torres georgianas del CAI, Shermadini y el ex colegial Sanikidze.
El pertinente tiempo muerto de Vidorreta no sirvió para meter la marcha más que necesita Tuenti Móvil Estudiantes, que en este primer cuarto sobrevivía gracias a Marko Banic y Dejan Ivanov, que terminaron pronto con el experimento inicial en los puestos interiores: 14-23 al final de los primeros diez minutos.
Los colegiales seguían anotando con cuentagotas, faltos de confianza, con muchos tiros fáciles bajo canasta que hacían la corbata, mientras que en CAI Zaragoza se unía al buen trabajo bajo los aros de los georgianos el acierto exterior: el inesperado Pere Tomàs y el resucitado Roll impedían que el Tuenti Estu recortara diferencias. Llegaron a ponerse a 8, pero un CAI de récord no perdonaba: clarísimo 25-44 al descanso.
Y no mejoraron las cosas tras el descanso: Roll y Rudez (¿otra vez el croata? ¡Nos la liaba ya cuando jugaba en Cedevita!) pusieron la puntilla con un 14-2 de salida en el tercer cuarto que ponía las ventajas mañas por encima de los 30 puntos. Un puntito de orgullo y la lógica relajación visitante – que Abós intentó evitar con algún tiempo muerto- redujeron la diferencia al 43-66 al final de este periodo.
Era tarea titánica, casi misión imposible, remontar. El equipo lo intentó, recordando partidos como el de Manresa esta misma temporada, pero las cosas no salían y CAI Zaragoza, simplemente tirando de oficio, tenía las cosas de cara.
Al final, como consuelo para una afición incansable y que es uno de los tesoros de este club, salieron Vicedo, Guerra y Brizuela. Obviamente, los chavales no obraron ningún milagro e incluso pagaron en ocasiones su bisoñez, como el tapón que puso Sanikidze a Brizuela como diciéndole el georgiano al donostiarra “el camino a la elite es difícil y ya lo comprobé vistiendo la misma camiseta que tú ahora”.
Al final, claro 62-89 en un partido que fue rojo CAI desde el principio.
Tuenti Móvil Estudiantes 62 (14-11-18-19) Guerra 0, Fernández 4, Vicedo 2, Colom 4, Banic 14, Kuric 17, Rubio 4, Rabaseda 0, Brizuela 3, Miso 1, Ivanov 13, Slokar 0
CAI Zaragoza 89 (23-21-22-23) Jones 4, Roll 13, Rudez 18, Urtasun 2, Llompart 6, Sanikidze 6, Marín 0, Shermadini 12, Tomàs 13, Tabu 15, Fontet 0
