Rubén Garcés, pívot panameño de 2.06 y 112 kilos de peso, cumplirá su cuarta temporada en la ACB tras recalar en la 2001/02 en el Fórum Valladolid y las dos últimas en el Leche Río Breogán, mientras que Richard Fox es un pívot de 2.11 centímetros y 120 kilos que acaba de completar su ciclo universitario en Gonzaga y que no ocupa plaza de extranjero al tener la doble nacionalidad estadounidense y española, por ser su madre de nuestro país.
«Es un gran paso en mi carrera», comentó Garcés que fue el encargado de abrir el fuego de las declaraciones, «porque voy a jugar en un equipo puntero de la Liga ACB y porque vamos a jugar en la Euroliga. Me hace mucha ilusión estar en este proyecto». Garcés tiene muy claros sus objetivos y los del equipo. «Quiero jugar más y mejor cada día y en Estudiantes puedo progresar mucho en mi juego y mejorar cada día. Todos los jugadores queremos lo mismo y el hecho de jugar la Euroliga fue otro de los aspectos que me hizo decidir. Es un gran reto para todos y también en esta competición podemos estar luchando por estar muy arriba», dijo. «Coincidí con el Pepu en las ligas de verano de la NBA y me fascinó su manera de ver el baloncesto. Tenemos el objetivo de ser mejores individualmente y como equipo. Para ello sólo hay medio: trabajo duro y dedicación. La única clave es dar el cien por cien en cada partido», continuó el pívot panameño.
Richard Fox, que poco a poco se va manejando mejor con el castellano y que en breve lo hará con mayor soltura afirmó que «Estoy muy contento de estar aquí. Quería jugar en España, porque tengo familia aquí y porque siempre me han dicho que se jugaba un baloncesto muy bueno». «Conozco bastante la Liga ACB y mi familia siempre me ha dicho que después de la NBA era el mejor sitio para jugar. De Adecco Estudiantes sé que es uno de los mejores equipos y que siempre está luchando por ser de los primeros», añadió el nuevo pívot colegial. Fox indicó que sus objetivos eran «jugar bien y, sobre todo, ganar muchos partidos, siendo consistente y anteponiendo la victoria del equipo por delante de cualquier otra cosa».
José Vicente Hernández, entrenador del Adecco Estudiantes, dio la bienvenida a los dos jugadores a los que deseó «una larga carrera en el club» e hizo pública la única promesa que les ha hecho: «mucho trabajo y humildad absoluta». «Para nosotros», siguió el técnico colegial, «es una obligación y un placer intentar mejorar la actuación del año anterior y luchar por superar a otros equipos más poderosos económicamente».
«Quiero aclarar que no están sustituyendo a Felipe Reyes. Necesitábamos otro tipo de jugador que nos aporte un juego interior potente para seguir con nuestro baloncesto intenso, sacrificado, que nos permite conseguir pequeños premios diarios y prepararnos para optar al premio grande», explicó. «Necesitamos rebote y defensa y tanto Richard Fox como Rubén Garcés pueden ayudarnos en esta faceta, aunque tampoco los vamos a coartar en ataque, al contrario, espero que se desarrollen y nos puedan echar una importante mano en la anotación», finalizó José Vicente Hernández.