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Yo no me hice del Estu por estudiar en el Ramiro. Yo estudié en el Ramiro por culpa del Estu.
Mi hermano mayor estudió siempre en el Ramiro de Maeztu y fue socio toda la vida en la época del Magariños, del Gavioto y demás. Yo era bastante pequeña pero recuerdo perfectamente como cada vez que se iba a un partido le acompañaba hasta la puerta y le esperaba en su habitación a que llegase para que me lo contase todo, con pelos y señales, y os puedo asegurar que a mí me parecía que había visto el partido con sus relatos. Tengo imágenes en la cabeza de David Russell machacando, de Vicente Gil dándole asistencias a Pinone, ¡¡y sin haber visto los partidos!! Es como si yo hubiese vivido esas quedadas en el Magariños para ir todos juntos en metro al pabellón del Madrid en la Castellana diciendo “paga el de atrás”… Me sabía todas las canciones, mi preferida era “Reagan es un carca, Chernenko un invasor y a toda luz resalta que Jomeini es el mejor”, y lo mejor es que se las enseñaba a mis amigas y las cantábamos cuando nos íbamos de convivencias con las monjas.
Y llegó el momento de hacerme socia. Estaba en primero de BUP, no tenía un pavo, claro, y una niña de mi colegio se había ido al Ramiro, y en aquella época a los alumnos les salía hacerse socio por cuatro duros. Pues me hice el carnet con su foto y su nombre, durante tres años fui “Raquel González” y me iba a cada partido con mi hermano. ¡¡Por fin!! Siempre me dejaba la bufanda (esa que pone Caja Postal y que después de veintitantos años huele a choto y no pienso lavar) y me sentaba con sus amigos que muy amablemente me ofrecían de lo que bebían, por entonces no me gustaba el whiski, y le preguntaban a mi hermano que si podían fumar conmigo delante, también se podía fumar dentro del recinto, qué tiempos. Y yo me lo pasaba pipa, viendo al Estu, comiendo pipas y rodeada de tíos 7 años mayores!!!! Mi hermano estudiaba en la facultad con Antúnez, eran colegas y le obligué a que le pidiese una autógrafo para mi!! el papel decía “para Begoña, de un antivikingo, Antúnez”. No comment 🙂
Hice mis primeras pellas por culpa del estu. Fue cuando ganamos la copa del rey. Estaba aun en BUP y el Estu llegaba un día de diario al Magariños,les dije a mis padres que ese día no iba al cole, que me iba al Ramiro, no rechistaron porque sabían que no tenían nada que hacer. Quedé con una amiga y nos fuimos las dos a fliparlo, porque aquello para nosotras era la pasada, Serrano cortado, la gente en los delfines, cantando, parando los coches, y cuando llegaron los campeones aquello fue el acabose.
Y claro lo de la Final Four, para qué os voy a contar, creo que ahí tuve también mi primer ataque de ansiedad jajajajaja… ese día ni siquiera esperé a que mi hermano llegase a casa a buscarme, me fui yo sola al Palacio, me senté por donde siempre y esperé a que llegase aunque luego me fui abajo del todo del fondo al borde de la cancha porque no podía más con mis nervios. Subía corriendo las escaleras para abrazarme a mi hermano y sus amigos, bajaba otra vez corriendo para decirles “cosas” a los árbitros, y al final, en fin, qué os voy a contar del final, todos abrazados, llorando, yo convencida que me iba a Estambul, pero claro, para eso están los padres, para quitarnos los pájros de la cabeza.
Llegó COU y no me lo pensé dos veces, me matriculé en el Ramiro, porque yo todo eso lo tenía que vivir desde dentro, y desde luego, las cosas habían cambiado un montón desde que mi hermano estuvo, pero para mí ya fue mucho poderme hacer socia con mi nombre, ir con mis propios amigos de clase a los partidos, conocer a Saturnino, ver La Nevera, entrar en el Magata, etc etc…… hasta hoy, donde sigo conservando a mis amigas “dementes”, a una en su despedida de soltera la vestimos con un traje de novia y la camiseta del Estu encima, estaba reguapa!!!!, sigo viviendo con la misma intensidad los partidos y siguiendo al Estu allá donde juegue, si es Carabanchel pues allí que se va, si es la Casa de Campo, pues bien también… y sobre todo, compartiendo con mi hermano todas las emociones que el Estudiantes nos da, buenas, malas, regulares, que de todo hay, y educando a mis sobrinos en el buen camino, que como salgan vikingos a mí me da otro ataque : )
Begoña Gil
(Foto: Russell en la Copa Príncipe de 1984, por M.A. Forniès)
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