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LEÓN, DE LOS GLORIOSOS ´90 A LA MALDICIÓN DE LA LEB

7 mayo 2008

El Baloncesto León durante diez años fue el típico equipo modesto capaz de plantar cara a cualquiera en la Liga ACB, especialmente en su cancha. Pero al “Estu” se le ha dado bien: 21 victorias por 7 de los leoneses… Eso sí, de esas 7, 6 han sido en su feudo, donde los colegiales se juegan este viernes la permanencia.

LEÓN, DE LOS GLORIOSOS ´90 A LA MALDICIÓN DE LA LEB

Un dato para asustar un poco y evitar relajación: MMT Estudiantes lleva diez años sin ganar en el Palacio Municipal de Deportes de León. En concreto, desde el 17 de octubre de 1998… claro que entre 2000 y 2007 el León ha militado en otra categoría. Los datos más fríos sí son claros y dan como favorito al “Estu”: 21 victorias colegiales por 7 leonesas en los enfrentamientos entre ambos clubes. También es favorable al club del Ramiro, pero menos, el dato de los enfrentamientos en León: 6 victorias leonesas por 7 del “Estu”.

El Baloncesto León vivió su época de gloria entre 1990 y 2000: diez temporadas consecutivas en la ACB desde que consiguiera ascender en la campaña 1989-90, ya con Gustavo Aranzana en el banquillo (en el que estuvo 8 años en esta primera etapa) y con el patrocinio de la ya mítica marca Elosúa.

Vestidos con una estridente equipación amarilla con ribetes verdes, los leoneses se convirtieron bien rápido en una de las revelaciones de la liga ACB de primeros de los 90. Con el escolta Xavi Fernández, que había llegado al equipo en la etapa de Primera B, y el alero estadounidense Micke Schlegel como estrellas, la primera campaña en máxima categoría se ahorraron el sufrimiento de los entonces complicadísimos playoffs de descenso, acabando vigésimos en una liga de 24 equipos. Además, lograron su clasificación para la fase final de la Copa del Rey de Zaragoza 91 (sí, la del no-triple de Herreros ante el Barça) aunque cayeron contra el Real Madrid en cuartos. Recordamos que entonces la clasificación para la Copa tenía un complejo sistema de eliminatorias previas.

La campaña siguiente superaría estos logros, de nuevo con Xavi Fernández como gran referente, acompañado de otros históricos como Alberto Angulo, Xavi Crespo o Raymond Brown. Con un juego sencillo y alegre, a la par que duro en defensa repitieron participación copera (Granada 92) en la que fueron testigos de uno de los más dulces momentos de la historia del Estudiantes, y lograron clasificarse para los playoffs…

Winslow en un partido de 1992 contra el Elosúa León

Donde se las verían, precisamente, ante el “Estu”, y con polémica. Los leoneses habían cuajada una excelente temporada regular: 25 victorias y 9 derrotas, sólo superados por el Joventut y empatados con el CAI Zaragoza. Según estos datos, les correspondía con toda justicia ser terceros. Pero quiso el complicadísimo reglamento, solo apto para ingenieros nucleares, que la liga ACB tenía vigente por aquel entonces, que acabaran quintos. Se trataba del denominado “factor de corrección”, que sin embargo favoreció al Estudiantes que con un balance de 24-10 se colocó en cuarta posición.

Leoneses y estudiantiles se verían las caras en cuartos de final, tras eliminar en octavos a Girona y Murcia respectivamente… y el “Estu” con el factor cancha en contra pese al factor de corrección que solo se aplicaba para los octavos de final. Definitivamente, una liga ACB para ingenieros…

El caso es que los colegiales comenzaban estos cuartos de final, al mejor de tres partidos, con el factor cancha en contra y sobre todo, moral y físicamente reventados tras la legendaria Final a Cuatro de Estambul. Sin embargo, lo que sucedió es que el Elosúa pagó los platos rotos por Joventut y Philips de Milán en la capital turca, y Winslow (25 puntos y 10 rebotes) y Herreros (29 puntos, con 5 de 9 en triples) quienes salvaron la situación, ayudados por las prisas de los locales, que se desquiciaron en la segunda parte cuando todo pintaba a su favor: 77-96.

En el segundo partido en el Palacio de los Deportes, buena parte de las gradas se tiñó del amarillo estridente del patrocinador del León. Los de Aranzana pusieron contra las cuerdas al Estudiantes, mandando durante buena parte del tiempo en el marcador. Pero la exhibición de Herreros (35 puntos) acabó con la resistencia del equipo revelación… en una temporada de equipos revelación (el propio “Estu” campeón de Copa y semifinalista de Liga Europea, el Joventut como gran rival a batir y final campeón de Liga…) El León volvería a tener presencia copera tres años más (1995, 1996 y 1997 como anfitrión y llegando a semifinales).

CINCO AÑOS DESPUÉS…
Estudiantes y León se volverían a ver las caras en playoffs cinco años después. Mientras, en ambos clubes habían cambiado muchas cosas, la primera, exterior debido al trasiego de patrocinadores que tiene este deporte: ahora era el Estu el que iba de amarillo, mientras que el León recuperaba el identificativo color rojo de su provincia. Seguía Aranzana en el banquillo leonés, pero ahora los que tiraban del carro en la pista eran jugadores como Byron Houston, Chris McNealy, José Lasa o un joven Óscar Yebra. En las filas del “Estu” teníamos a un jugador con el que parecía que había “custodia compartida” entre León y Estu: Harper Williams, uno de los pocos jugadores que ha vestido ambas camisetas en ACB junto a Quique Bárcenas.

Gonzalo Martínez se cuela entre la defensa leonesa, en 1997

Aquellos playoffs eran al mejor de cinco, y el “Estu” salió del Palacio con un contundente 2-0. Una vez con la eliminatoria en León los de Aranzana forzaron el cuarto partido, pero ahí se terminó. El sexto puesto final del León les llevó a su primera participación europea, en la Copa Korac, ahora con Edu Torres en el banquillo.

La etapa del León en ACB duraría un par de temporadas más: en la campaña 1999-2000 descendieron con un balance de 10-24 (sólo una victoria menos que el 14º clasificado). Siete largos años les costó recuperar la categoría. En la Liga LEB alguien les debió echar un mal de ojo, ya que hasta en cuatro ocasiones tuvo el ascenso en la palma de su mano, tras una buena liga regular y llegar a las semifinales, y hasta la quinta no fue la vencida, la temporada pasada contra el CAI Zaragoza en una eliminatoria épica donde vencieron con el factor cancha en contra. El año más sangrante fue la campaña 2005-06, en la que habían quedado primeros en liga regular, pero en las semifinales les arrolló por 0-3 el Guipúzcoa Basket, un modesto recién ascendido a la LEB.