Eran las 21:30 horas de la noche y tras una cena más corta de lo normal las jugadoras, cuerpo técnico, y el resto de integrantes del USP-CEU MMT Estudiantes “tomaban” el salón de un café cercano al hotel de concentración para vivir unas emociones extras antes del decisivo partido de mañana ante el Joventut Mariana.
El mal inicio de partido de los de Velimir Perasovic hizo que la alegría inicial diese paso a una cierta preocupación la cual se veía perfectamente reflejaba en la cara de los presentes. Al descanso la plantilla de jugadoras abandonó el local para descansar en sus habitaciones de cara al partido de mañana, cuyo inicio está fijado a las 10 horas.
El resto del grupo mantuvo los nervios hasta el final del choque en el que ni las sillas, ni las mesas de la cafetería, servían como recurso para mantenerse sentados y relajados; el último tiro del Vive Menorca propició que un silencio sepulcral invadiese durante esas centésimas de segundo el bar santiagués. Tras el tiro errado por los baleares la tensión se liberó en forma de abrazos, sonrisas y felicitaciones, los chicos del MMT Estudiantes también habían dado la de cal en este día tan importante para la entidad de la calle Serrano.