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De largo el equipo más alto del torneo, Letonia propuso una vez más un nivel físico y atlético que España solo pudo aguantar los 20 primeros minutos de partido.
Los letones dejaron a España en tan solo 5 puntos en el tercer cuarto, mientras que ellos anotaron 20 puntos para sobreponerse de la desventaja al descanso del 40-38 y terminar así el tercer cuarto 58-45 arriba.
El partido fue una gozada de ver para los espectadores, con jugadores jóvenes llenos de calidad en ambos equipos y que poseen los fundamentos del baloncesto y tienen grandes cualidades técnicas.
Lo que decantó la balanza a favor de Letonia fue su máxima motivación para jugar al 101% cada posesión. Además, tienen el físico, aguante y determinación para conseguirlo.
España se vio superada en la pintura (49-44 en rebotes) y, en muchas ocasiones, forzada a elegir malas situaciones de tiro (37% en tiros de campo).
A los de Luis Guil no les gusta perder. Por ello la Selección intentó una última estrategia, forzando una presión en zona a mitad de pista. Pero los letones tenían la capacidad táctica para superarla y, aunque la diferencia se vio reducida, nunca vieron peligrar la victoria.
Vecvagars con 22, Jakovics con 16 y Silins con 10 puntos y 12 rebotes fueron los puntales de la selección letona para superar a España, que tuvo en Dani Díez de nuevo a su mejor hombre con 16 puntos y 12 rebotes. Guillem Vives anotó 14 puntos y Jaime Fernández 12.
El siguiente partido, el sábado a las 17:00 hora española, ante Israel, debe servir para certificar la segunda posición del grupo y pasar así a la segunda fase con el mejor balance posible.
