Como si estuviera acostumbrado en algunos de los últimos partidos en Liga Endesa con Movistar Estudiantes. Gian Clavell sufrió, y de qué manera, para llevarse los dos partidos que tenía que ganar Puerto Rico para estar en la Copa del Mundo.
El primer «match ball» mundialista fue contra Argentina, en San Juan. Los boricuas dominaban de 10 ante la albiceleste, ya clasificada. Pero en un minuto y medio forzaron la prórroga, en la que Puerto Rico se llevó el gato al agua por un único punto: 87-86.
«Clavelito» fue el mejor de los suyos, pese a salir desde el banquillo: 21 puntos, 5 rebotes y 1 asistencia para 23 de valoración y jugadas como estas en 29 minutos.
En el último partido, de nuevo en San Juan, se veían las caras los dos equipos con opciones mundialistas en la fase de clasificación americana: Puerto Rico y Uruguay. La derrota podría servir a los puertorriqueños… pero dependiendo de resultados de terceros (que no se dieron). Mejor no especular.
Pero si no es sufriendo no les gusta. Los boricuas ganaron por un ajustado 65-61: empezaron perdiendo atenazados por los nervios 9-19 en el primer cuarto y fueron igualando poco a poco el encuentro.
El escolta de Movistar Estudiantes volvió a ser importantísimo para los suyos: 13 puntos y 2 rebotes, saliendo desde el banquillo, en 22 minutos.