
La defensa fue una vez más la base para lograr la victoria. Agobiante y sin descanso, España secó a Rusia en la primera parte, dejándola en tan solo 28 puntos, cuando cada posesión de los rusos parecía terminar en pérdida.
De hecho, esos últimos minutos del segundo cuarto y los primeros del tercero fueron claves para el devenir final del partido. En esos cuatro minutos Rusia lanzó tres veces a canasta; el resto de posesiones acabaron en un total de seis pérdidas, lo que dio a España todo el tiempo del mundo para ampliar la ventaja, que pasaba del 33-28 al 46-28, una montaña casi insalvable para los rusos.
Los de Sito Alonso pudieron despegarse más en el marcador de no ser por sus pobres porcentajes de tiro (36’6%). Aún así, esa diferencia de 16 puntos parecía suficiente para desmoronar el plan ruso.
La verdadera selección rusa apareció entonces y llegó a jugar de tú a tú a España, cometiendo tan solo 4 pérdidas en los siguientes 18 minutos.
Los dos excolegiales, Sebas Saiz y Dani Díez, que terminó en el quinteto ideal de la competición, ambos con experiencia en partidos por las medallas, se combinaron para anotar 34 puntos y capturar 21 rebotes, siendo claramente responsables de los 16 puntos tras rebote ofensivo que anotó España. De hecho, el pivot capturó 9 rebotes ofensivos que, unidos a las continuaciones o a las faltas recibidas, mantuvieron a España a flote, a pesar de los malos porcentajes de tiro. Por su parte, Guillem Vives protagonizó el despegue de la Selección en el tercer cuarto y terminó con 16 puntos, 5 rebotes y 4 asistencias.
España tuvo que vivir de las rentas de esas segundas oportunidades por muchos minutos, pero mantuvo la entereza que faltó en semifinales para no dejar a Rusia acercarse y celebrar así una medalla más en un Europeo U20. Un bronce festejado con rabia que sirve de guinda a un torneo en el que la Selección fue de menos a más para terminar siendo capaz de reponerse del varapalo de semifinales. El colofón perfecto a la trayectoria de formación de la Generación del 93. ¡Enhorabuena!
Nacho Torrico ( @Torrichano )