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Distinta franja horaria, distinto clima, distinto paisaje, e incluso distinta metodología deportiva, son muchas las diferencias que puede haber entre ambos clubes, sin embargo les une algo mucho más importante que lo anterior: la pasión por el baloncesto.
Así, con el baloncesto como punto de partida, siete jugadoras del CB Arrecife de Lanzarote se embarcaron en un viaje hacia la capital para vivir una experiencia nueva: convivir dentro del seno del Asefa Estudiantes, y con la sola misión de disfrutar.
“LA FUNCIÓN VITAL DEL HOMBRE ES APRENDER”
No se equivocaba Aristóteles al decir esta frase hace ya muchos siglos, pues si hay algo que el ser humano nunca termina de hacer es aprender.
El aprendizaje ha sido el claro objetivo de toda esta experiencia, pues jugadoras y entrenadores de ambos clubes han podido compartir sus formas de juego, sus metodologías, sus errores y sus mejoras, en definitiva, han compartido sus distintas maneras de disfrutar de este gran deporte que une a muchas personas.
FORMARSE COMO JUGADORA
El pase, el tiro o el movimiento de pies son muchas de los aspectos técnicos que cada jugador de baloncesto debe trabajar en los entrenamientos para ser mejor cada día.
Sin embargo, eso no lo es todo, y Asefa Estudiantes es uno de clubes que se caracteriza por no formar sólo grandes jugadores, sino por formar excelentes personas.
Fuerza, coraje y humildad pueden ser unos de los muchos valores que se trabajan alrededor del Magariños todos los días, no sólo para ganar en la cancha, sino sobretodo para ganar fuera de ésta. Hacer piña, vivir el vestuario y disfrutar de lo que uno hace son elementos que no aparecen en las estadísticas, pero que, sin embargo, hacen ganar partidos, y más aún, hacen ganar experiencias para la vida.
Todo ello supone un segundo objetivo en esta experiencia, formarse como jugadoras y como personas desde pequeños, desde infantiles.
VOLVER CON LA MALETA LLENA
Las siete jugadoras canarias que realizaron este viaje no sólo han compartido entrenamientos con las colegiales, sino que han podido convivir con ellas. Por ello, han vuelto a Lanzarote con la maleta llena de recuerdos y anécdotas que compartir con toda su gente.
Además, como colofón a esta inolvidable semana, tuvieron la oportunidad de ver uno de los entrenamientos del LF2, y formar parte de ese público especial en la victoria del sábado del Asefa Estudiantes frente a CBF Sarriá. Al final de este encuentro las colegiales se hicieron una foto de familia con las jugadoras del CBF Arrecife para inmortalizar toda una semana llena de vivencias, experiencias y diversión.
