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Empezaron el partido Cook, Brizuela, Gentile, Caner-Medley y Jankovic; y fue la “Mamba Vasca” la protagonista del arranque, por lo bueno y lo malo: matazo para el 2-2, y susto que le obligó a irse al banquillo tras un golpe.
Singler empezó a abrir ventajas para los gallegos (15-8, tiempo muerto). Dos “Gentilazos” recortaron diferencias en un primer cuarto que acabó 19-14; y donde lo mejor fue que lo de Brizuela efectivamente se quedó en susto.
Hakanson, Brizuela, Sola, Vicedo y Suton empezaron el segundo cuarto. Aunque golpearon primero los gallegos (23-14), Movistar Estudiantes empezó a encontrarse fresco en ataque e intenso en defensa. El capitán Vicedo, con un triple, puso la cosa en dos puntos mediado el cuarto: 25-23.
Empiezan a llover triples
Pero el tiempo muerto del Alquimista Moncho cambió la cara del Monbus Obradoiro: a triples, Obst y Vasileiadis pusieron 34-23 el encuentro en un pis pas. Tiempo muerto, ahora de Berrocal, aunque no tuvo el mismo efecto. Obst había dejado la lata de los triples abierta, a la que se sumó Simmons. Al descanso, los 6 triples gallegos en este cuarto abrieron la brecha: 46-30.
Tras el descanso, se calmó la locura triplista del Monbus Obradoiro, pero Movistar Estudiantes no lograba encontrarse a gusto para reducir diferencias de manera significativa. Brodziansky se sumó a la fiesta triplista, pero Caner-Medley le respondía para que la diferencia al menos no aumentara: 56-43 tras cuatro minutos.
Pero era cuestión de tiempo que los triples gallegos volvieran a entrar: Llovet se sumó a la fiesta y puso la máxima hasta el momento, 62-45. Y no dejaba de llover: 75-58 al finalizar el cuarto, pese a los destellos de Gentile.
Se suspende el Resurrection Fest
Salió enrabietado Movistar Estudiantes: 0-8 de salida en minuto y medio, con triples de Cook y Clavell: 75-64. Llovía más flojo. Tiempo muerto. Clavelito permitía seguir creyendo (77-66), aunque una técnica de Cook por simulación frenó la reacción colegial.
¡Clavelitos, clavelitos de mi corazón! El puertorriqueño se echó al equipo a la espalda: 78-68, aunque erró el ataque que hubiera bajado de esa diferencia. Turno para Nik Caner-Medley. El de Massachussets logró poner, desde el tiro libre, por primera vez desde el segundo cuarto menos de diez abajo a Movistar Estudiantes: 80-71.
De nuevo Clavell, de tres; y Omar Cook, sin oposición, pusieron al Estu al borde del milagro a falta de 3 minutos y medio: 80-76. 5-20 de parcial para los colegiales.
Brodziansky, desde el tiro libre, frenó el “Resurrection fest” colegial (84-76). Aunque Gentile se sacó el conejo de la chistera, una protestada falta en ataque del italiano y la posterior canasta de Obst sentenciaron el encuentro a falta de minuto y medio: 86-78. Al final, 91-81.
Octava derrota de Movistar Estudiantes, que deja a los colegiales en la parte delicada de la clasificación. El próximo domingo a las 12:30h, un Valencia Basket en su mejor momento de la temporada visita el WiZink Center. Un nuevo reto en el que el sexto hombre que es siempre la grada será crucial. Entradas desde 15€, que incluyen acceso a la fiesta infantil de Navidad, desde dos horas antes.
