Movistar Estudiantes, vestido de negro, pareció en el primer cuarto aquel de hace 25 años al que había homenajeado unos minutos antes (14-3 de salida, 20-10 al final), guiadas por un excelso Edwin Jackson… pero en el segundo cuarto pagó la falta de acierto en triples (no anotó desde fuera hasta después del descanso). Pero como esto es el Estu, cuando el partido parecía sentenciado (14 abajo), los colegiales llevaron el encuentro a un final de infarto de mano de Jaime Fernández, Arteaga y Wilson. Pero a la hora de la verdad, Larkin sentenció y aguó la fiesta estudiantil.